Colombia cerró el 2024 con un déficit fiscal del 6,8 % del PIB, la cifra más alta en dos décadas, solo superada por los años de la pandemia. Así lo dio a conocer el ministro de Hacienda, Diego Guevara, durante la presentación del plan financiero 2025.
El dato, que superó el 5,6 % previsto, ha generado preocupación entre expertos y exfuncionarios. José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda, señaló que “después de tres años de ajuste fiscal exitoso, de nuevo se eleva el déficit fiscal de manera significativa, además de que la deuda pública crece al 60 % del PIB”.
El aumento del déficit se debe principalmente a un gasto público desmedido y una caída en los ingresos tributarios. Analistas atribuyen la situación a la declaratoria de inexequibilidad de varios impuestos incluidos en la última reforma tributaria, así como al lento crecimiento económico que ha afectado gravemente el recaudo.
“Esto se deriva de la declaratoria de inexequibilidad de muchos tributos y, seguramente, del menor crecimiento económico que no genera el recaudo suficiente”, agregó Restrepo.
La situación plantea la necesidad de una estrategia fiscal más eficiente para controlar el gasto público y aumentar los ingresos tributarios. Expertos advierten que, de no tomar medidas urgentes, el país podría enfrentar dificultades para financiar proyectos clave y mantener la estabilidad económica.
