Mujeres campesinas Antioqueñas

0
442

En los verdes paisajes montañosos de Antioquia, entre las sombras de los árboles y el murmullo de los arroyos, las mujeres campesinas tejen historias de fortaleza y resistencia. Sus manos, curtidas por el sol y el trabajo duro, son testigos de una vida dedicada a la tierra y a la familia.

Las mujeres campesinas antioqueñas son guardianas de la tradición y la cultura; en sus fogones se preservan recetas de nuestros ancestros, en cada palabra con acento paisa y con cada acción digna de las más valientes cuidan cómo tesoros  los secretos de la tierra, cultivan los alimentos que nutren a sus comunidades y preservan las prácticas ancestrales que han pasado de generación en generación. Son las cuidadoras de la biodiversidad, protegiendo las semillas criollas que son la base de nuestra seguridad alimentaria.

Pero su labor va más allá de las tareas agrícolas, Las mujeres del campo son el pilar de sus hogares y comunidades,son madres que tienen como parte de su propósito el bienestar de sus hijos, asegurando que tengan acceso a la educación y a mejores oportunidades. Son líderes comunitarias que luchan por los derechos de sus vecinos y por la protección de la naturaleza que los rodea.

La feminización de la agricultura campesina, se ocasiona principalmente por la migración de la mano de obra masculina en busca de trabajos más “rentables” que las labores de la tierra; Por tanto las mujeres se convierten en las responsables de la producción y la vida familiar; sin embargo, ellas no suelen tener propiedad, ni control sobre la tierra y otros recursos conexos, lo cual disminuye su capacidad negociadora y su participación en la toma de decisiones.

A pesar de los desafíos que enfrentan ¡las mujeres rurales no se rinden! Con ingenio y determinación encuentran formas de adaptarse a los cambios climáticos y económicos que afectan sus vidas, Se organizan en cooperativas y asociaciones para fortalecer su voz y mejorar sus condiciones de trabajo. Son ejemplo de resiliencia y tenacidad para todos los que hemos tenido  el privilegio de conocerlas.

En un mundo que a menudo olvida el papel de las mujeres en la agricultura y el desarrollo rural, es fundamental valorar el trabajo de las mujeres campesinas de Antioquia y como sociedad debemos seguir en el camino de  reconocerlas como sujetos de derechos agrarios, Son guardianas de la tierra, sembradoras de esperanza y constructoras de un futuro más justo y sostenible para todos.