Piramidismo: La dolorosa deformación que sufren las tortugas víctimas de tráfico ilegal en Antioquia

0
250

El tráfico ilegal de tortugas en Antioquia ha alcanzado niveles alarmantes en los últimos meses, según denunció Cornare, la Corporación Autónoma Regional de las Cuencas de los Ríos Negro y Nare. Cornare reportó que este año, a través de su Centro de Atención, Valoración y Rehabilitación (CAVR), han ingresado 423 tortugas, principalmente a causa del tráfico y tenencia ilegal. La especie más afectada ha sido la morrocoy, con 308 casos.

Los expertos del CAVR han observado un aumento significativo de enfermedades metabólicas entre las tortugas rescatadas. Estas enfermedades son consecuencia del cautiverio, el estrés, la mala alimentación y el maltrato. Una de las condiciones más comunes y devastadoras que afecta a estas tortugas es el piramidismo, una deformación del caparazón caracterizada por el crecimiento anormal de placas que forman una especie de pirámide en el lomo del animal. Esta deformidad no solo es una cuestión estética, sino que también causa un grave deterioro en la función respiratoria al reducir el espacio necesario para el desarrollo de los órganos internos.

El piramidismo puede provocar la muerte dolorosa de las tortugas debido al colapso lento de su organismo. Si la tortuga afectada está en etapa de gestación, la deformación le impide poner huevos, lo que puede llevar a una falla orgánica total y una muerte lenta y agonizante.

El piramidismo es casi exclusivamente una enfermedad derivada del cautiverio, desencadenada por el desequilibrio de factores esenciales para el desarrollo adecuado de las tortugas, como la exposición a rayos ultravioleta, necesarios para la asimilación del calcio y la vitamina D. En la naturaleza, estos reptiles regulan naturalmente estos procesos, pero en cautiverio, la falta de conocimiento de los propietarios o traficantes resulta en una exposición solar insuficiente y una dieta inadecuada.

Aunque el piramidismo es incurable, las tortugas en las etapas iniciales de la enfermedad pueden llevar una vida digna bajo el cuidado de personal experto, que puede controlar los síntomas.

Cornare hace un llamado urgente a la ciudadanía para combatir el tráfico ilegal de especies, una de las mayores crueldades que persisten hoy en día. Este tráfico no solo amenaza la vida silvestre, sino que también representa un riesgo de transmisión de enfermedades zoonóticas, aquellas que pueden pasar de animales a humanos, como la Salmonella.

“Recordemos que esta especie también puede generar enfermedades zoonóticas, como la Salmonella, por tenencia ilegal en nuestras casas. Desde el Área Metropolitana hacemos un llamado a aprender a cohabitar con todas las especies silvestres, pero en libertad”, señaló Andrés Gómez Higuita, supervisor del CAVR de fauna silvestre de Cornare.

La lucha contra el tráfico ilegal de tortugas en Antioquia continúa, y la colaboración de la comunidad es crucial para proteger a estas especies y garantizar su supervivencia en su hábitat natural.