Programa Seguimiento Judicial al Tratamiento de Drogas

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Una alternativa para los adolescentes en conflicto social.

Muchos jóvenes en Colombia, debido al consumo desmedido de sustancias psicoactivas, se enfrentan desde temprana edad al Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes, dada la comisión de un delito que fue motivado por el consumo problemático de drogas ilícitas en el entorno social. 

El programa de Seguimiento Judicial al Tratamiento de Drogas que es desarrollado en el municipio de Rionegro, cuenta con el apoyo de la gobernación de Antioquia, y busca brindar una alternativa de atención integral a los adolescentes mayores de 14 años y menores de 18 años, que voluntariamente ingresan al Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes, para atender su consumo problemático de sustancias psicoactivas a través de la EPS con el apoyo de operadores del ICBF, desarrollado en cuatro componentes integrales: jurídico, médico-sanitario, de resocialización – reeducativo y de inclusión social.

“Este programa busca que la atención que se haga con los adolescentes sea a través de las EPS frente al tratamiento que requieren estos en una condición denominada patología dual, que es una condición del trastorno de la salud mental, asociado al consumo de sustancias psicoactivas. Muchos de los adolescentes que ingresan al Sistema de Responsabilidad Penal, comparten este tipo de diagnóstico, y lo que se busca es hacer una atención integral para que el adolescente logre recuperar su funcionalidad social”, explicó Mauricio Ramírez, coordinador encargado del programa en el municipio de Rionegro. 

Mauricio, también nos explicó en qué consisten los cuatro componentes que desarrolla este programa con los jóvenes: 

“Para este caso, para el Seguimiento de Tratamiento de Drogas a través Sistema de Responsabilidad Penal. El primero es el componente jurídico, que es el que da toda la línea técnica y jurisprudencial para poder poner en marcha el proyecto. El segundo tiene que ver con el componente médico sanitario, que es todo lo que tiene que ver con el seguimiento y la atención de los adolescentes que ingresan al Sistema de Responsabilidad Penal a través de la EPS para que logren realizar, o se logren atender para superar los problemas de adicción. El tercero es el componente de resocialización y educación, que básicamente son las modalidades de atención a través de los operadores del ICBF, y el cuarto es un componente de Inclusión Social, donde se busca vincular a los adolescentes a su proyecto de vida, atender a través de los entes territoriales, todo lo que tiene que ver con el acceso a las oportunidades laborales, académicas, emprendimiento, cultural, deporte, etc.” 

Sebastián Londoño Sierra, director de Seguridad Ciudadana, convivencia y acceso a la justicia de la Secretaría de Justicia de la Gobernación de Antioquia, en entrevista para EL RIONEGRERO, refirió: “es muy importante resaltar la vinculación de la Alcaldía de Rionegro y de la Gobernación de Antioquia, con lo que pretendemos que los jóvenes que hayan cometido conductas por la situación penal, o sea, que están en conflicto con la Ley penal, pero que la comisión de esas conductas está asociada al consumo problemático de drogas, puedan encontrar una ruta alternativa en la cual ellos puedan restaurar el daño, puedan restablecer las relaciones que tienen con su entorno familiar, eso condicionado a que de manera voluntaria ingresen a un programa para el tratamiento del consumo problemático de drogas. 

Lo que buscamos también, es que en el marco de ese proceso, además de las prácticas restaurativas con las más que puedan fortalecer o restablecer esos vínculos con su entorno familiar y con su entorno comunitario, es que con la articulación de la oferta de la Gobernación y el liderazgo de la coordinación desde el Municipio de Rionegro, empecemos a conectar estos jóvenes con otro tipo de oferta que les permita vincularse cada vez más, y en la mayor medida de lo posible, alejarlos de esas prácticas y esos entornos, que facilitan el consumo, que de manera más probable los conducen, no sólo al consumo, sino por esa vía también a la vinculación  a conductas ilegales.

En este punto es muy importante señalar la labor de Mauricio como coordinador en Rionegro, porque este trabajo conjunto que estamos haciendo desde la Gobernación, implica una persona con el conocimiento que tiene Mauricio, para estar haciendo seguimiento dentro de lo que será ese plan de trabajo de cada uno de los jóvenes para que asista a sus citas, para que asista al tratamiento y vaya cumpliendo los compromisos con base en los cuales, va a obtener ese tratamiento distinto, diferenciado”. 

Tanto para Sebastián, como para Mauricio, es claro que el ideal del programa es erradicar el consumo en su totalidad, pero al ser un problema de salud púbica, ven como positivo el hecho que, “allí donde son policonsumidores (de más de una droga), sus consumos se reducen en términos de sustancias, de frecuencias y demás”, insistiendo que hay casos en los cuales se elimina completamente el consumo de drogas, logrando un importante aporte a la reducción de violencia en los adolescentes.